FESTEJO ELEFANTE

Algunos de los protagonistas de Hindú hablaron con Guinderas tras haber logrado que el título URBA Top 14 volviera a ser del “elefante” por séptima vez en su historial.

Por Cecilia Baran

Francisco Bosch, centro de Hindú, dijo lo siguiente: “Me parece que no hay secreto sino mucho trabajo, ganas de hacer bien las cosas, de estar juntos y de vivir el rugby como lo vivimos. No sabemos si es muy lógico lo que hacemos pero es como nos sale y lo que nos hace felices. Estamos muy contentos por lo que pasó hoy. Tuvimos un buen año y, si bien empezamos con alguna duda, logramos encontrar el equipo.” Con sentido del humor, un poco en broma y un poco en serio, agregó: “Se retiraron grandes jugadores y que Hindú siga funcionando está bueno porque sino de aca a unos años íbamos a seguir escuchando -cuando jugábamos nosotros…- Hoy no jugaron ellos y ganamos igual. Me parece que la línea de juego de Hindú se respeta y es lo más lindo que sacamos hoy.”

-¿Querés decir que Hindú forma jugadores para que el equipo vaya siempre para adelante?

-Hindú es medio un milagro. Si nos ven entrenar se darían cuenta que no practicamos un sistema de juego. Se siente, está en el aire de Torcuato jugar al rugby como jugamos. Sé que jugamos a meterle ritmo, a tratar de tener continuidad, a sacar alguna diferencia en el uno contra uno y disfrutar del pase; eso es lo único que sabemos. Hacemos lo que sentimos; a veces sale bien y otras no.

-De afuera se observa un muy buen entendimiento entre ustedes… ¿qué mensaje le dejás al equipo?

-Está en el aire de Torcuato el rugby que jugamos. A disfrutar esta noche, el verano y en febrero nos bajemos del elefante para empezar a soñar de nuevo.

Nicolás Fernández Miranda, ex jugador de Hindú, de Los Pumas y actual entrenador del equipo de Don Torcuato, declaró: “Me preguntaban antes de que terminara el partido y siempre digo que es lindo ganar una final. Es importante. Pero considero que el éxito este año ya se había logrado con el grupo espectacular que se formó. Los jugadores demostraron disfrutar de estar juntos, entrenar y prosperar tanto partido a partido como entrenamiento a entrenamiento.”

-Ahora que sos entrenador y estás afuera de la cancha, ¿cómo vivís las decisiones que toman los jugadores durante el partido? ¿Te ponés nervioso?

-Como jugar no hay nada. Creo que lo más lindo que hay es estar dentro de la cancha y poder decidir. Como entrenador lo único que me queda es tratar de ayudar a los chicos a que disfruten estando juntos, las vivencias en el club y darles ánimo para que jueguen el mejor rugby posible.

Nico dejó dos mensajes. Uno de ellos es para el equipo: “Solamente decirles gracias por todo lo que nos hicieron disfrutar durante todo el año.” El otro, es especial para el Cubano Bosh, quien dijo en un tono gracioso y divertido a modo de broma, después del partido en que le ganaron a Newman en semifinales, que por fin no hay más nombres en el equipo de esos que venían desde el 92´como los Senillosa, Fernández Miranda y que ahora están del touch para afuera: “Cubano, realmente tenés razón. Felicito sobre todo a los más grandes por animarse a tener la manija del grupo, a disfrutar y a hacer las cosas a su manera. Cada etapa es distinta. La nuestra pasó hace mucho y lo más lindo es que ustedes puedan disfrutar esto.”

Patricio Solano, segunda línea del equipo campeón y autor de uno de los tries del partido ante La Plata, expresó: “Estoy muy contento. Nos costó. Fuimos de menos a mayor. Al final del campeonato nos concentramos en terminar de la mejor manera y eso nos trajo con convicción hasta aca. Con alegría y ganas de jugar fue de la manera como salimos del vestuario hoy.” En relación a cómo se logró el triunfo explicó: “Las finales, tal vez no son tan vistosas. Logramos sumar con tries y no sólo con la patada. El partido se da así porque el que comete un error lo paga caro.”

-¿Lograste un buen cierre para terminar una etapa de altibajos?

-Sí, venía de dos añitos complicados. Pensé que no iba a llegar y la verdad que es una alegría enorme haberlo logrado. Mucha gente me acompañó, me dio fuerzas y creo que eso fue lo que me hizo entrar hoy a jugar.

Lucas Camacho, wing de los de celeste y amarillo, cuando le preguntamos qué era lo primero que se le cruzaba por la cabeza, dijo: “Una alegría inmensa. Una emoción tremenda. Pensarlo creo que es imposible, antes del partido no imaginé esto, ni mucho menos la gente. Es tremendo, es una alegría gigante.”

-¿Cómo prepararon la semana previa a la final?

-Tratamos de pulir algunas cosas en lo técnico y no tanto en lo físico. Tal vez con un poco más de nervios pero como todas las semanas seguimos tratando de mejorar, de hacer nuestro juego que es la única fórmula con que nos va bien: seguir jugando, poniendo todo y, no tengo dudas que, si seguimos así los resultados van a seguir viniendo.

-¿Cómo y cuánto tiempo se festeja?

-Se festeja con una alegría tremenda. No puedo ni pensar en el festejo. Creo que hasta mañana a la tarde; pero no sé, estoy fundido, no puedo más.